Trabajadoras de la salud del Hospital Roosevelt denuncian públicamente falta de insumos
Fotografía: Stef Arreaga
“Somos trabajadores del Hospital Roosevelt y estamos indignados porque nuestras autoridades lamentablemente no están cumpliendo con los mínimos requisitos que tendríamos que tener: no hay mascarillas, no tenemos batas, no tenemos el equipo necesario para poder atender a los pacientes que vengan positivos o no (…) Nosotros como personal de salud tenemos que tener las medidas de seguridad necesarias pero no nos prestan atención (…) ayer ya dio positivo un compañero que tuvo contacto con pacientes y personal”.
Este miércoles 29 de abril, dos trabajadoras de salud del Hospital Roosevelt, hicieron una denuncia pública en vivo, desde nuestra página de Facebook de Prensa Comunitaria. Hicieron énfasis en la falta de insumos, en el riesgo de contagios por tener poca protección y no tener acceso a hisopados para la detección de Covid-19, aunque este hospital es uno de los cinco lugares autorizados para realizar pruebas en su laboratorio.
Contagios en el departamento de cirugía
Según relató una de las dos enfermeras del departamento de cirugía, un enfermero de este hospital dio positivo el 29 de abril, y fue trasladado a uno de los hospitales habilitados para los casos positivos por la Covid-19. Además cinco personas más de enfermería –incluyendo la jefe del servicio– y seis médicos, que fueron enviados a cuarentena. Aseguraron que al menos 30 personas más del servicio de enfermería se encontraban laborando con él, y que hasta ayer no les habían realizado el hisopado, ni les habían ofrecido equipo adecuado. A los únicos que les hicieron pruebas es al personal médico.
Algunas enfermeras prefieren quedarse a dormir en el hospital, por temor de contagiar a sus seres queridos.
Con lágrimas en los ojos dijeron: “da mucha tristeza y da mucho coraje que nuestro presidente salga diciendo que tenemos todo el equipo necesario, para trabajar y es mentira, aquí no nos han dado nada. Nosotros hablamos con unas amigas pidiendo una donación de mascarillas N95, caretas y lentes, porque no es justo que nosotros no tengamos ni siquiera la mínima protección para atender a nuestros pacientes.”
La enfermera agregó que en el departamento de cirugía de todas las especialidades, hay alrededor de 300 enfermeros y enfermeras, más de 150 médicos laborando, más el personal de mantenimiento y las y los pacientes, quienes se encuentran en riesgo.
Solicitan equipo mínimo para trabajar
Al preguntarles qué necesitan para poder trabajar respondieron: mascarillas, caretas y lentes. Hicieron referencia a que al solicitar mascarillas N 95 o de tipo quirúrgico, y que el director Marco Antonio Barrientos Rivas les indicó que no había ni en el hospital ni en Guatemala. Según la denuncia las que las que entregaron, son hechas a mano y no pasan la prueba del spray. Es por ello que el mismo personal ha decidido comprar mascarillas con sus propios recursos y está tomando sus propias medidas de seguridad.
Según el testimonio, el hospital tiene protocolos para evitar los contagios del personal, sin embargo, la primera semana de abril se violaron dichos protocolos, ya que un médico residente llevó al hospital a un familiar que presentaba síntomas de la Covid-19, como resultado de esta situación, otros familiares del médico y una médica, resultaron contagiados, poniendo en riesgo y en cuarentena a 29 médicos residentes y 2 jefes de área de emergencia. El 23 de abril el director del hospital dijo a Emisoras Unidas, que se les había realizado las pruebas al personal y que habían dado negativo, por lo que estarían siendo integradas paulatinamente a sus labores.
La enfermera recalcó que el riesgo es inminente, ya que cuando llega una emergencia y requiere atención quirúrgica no pueden tomarles la prueba del Covid-19 antes de intervenirlos y esperar el resultado por ser casos urgentes “corremos el riesgo que los pacientes vengan infectados y nos contagien a nosotros. Nosotros como trabajadores no nos estamos negando a nada, lo único que queremos es que nos den lo necesario para trabajar.”
El presidente Alejandro Giammattei había informado el 13 de abril de algunas restricciones, incluyendo la restricción de locomoción de personas adultas mayores, embarazadas, niños y personas con problemas de salud y enfermedades crónicas, muchas personas con estas características siguen laborando en los hospitales: “aquí dentro de nosotros habemos varios hipertensos, diabéticos y con problemas renales que estamos laborando pero afortunadamente estamos controlados. Sin embargo hay médicos mayores de 60 años, que no tienen enfermedades crónicas pero están descansando en su casa cómodamente.” Agregó.
La Sub filial y secciones del Hospital Roosevelt y sindicato nacional de empleados del Hospital San Juan de Dios enviaron una carta al director del hospital Roosevelt el 17 de marzo del 2020 en donde además de transporte solicitaban mascarillas para evitar contagios.
Foto: Sub filial y secciones del Hospital Roosevelt
Enviaron un mensaje al presidente Alejandro Giammattei
“Al presidente le exigimos que nos cumpla con darnos lo mínimo, lo que necesitamos para trabajar. Que sea honesto, que hable los casos reales que hay en Guatemala, que no oculte información para que la gente esté enterada y realmente sepan lo que está pasando en Guatemala. Es injusto que solamente hayan utilizado la enfermedad para seguir robando.”
La trabajadora de la salud, aseguró que solo en cuarentena hay más de 25 mil personas y que están convencidas que hay muchos más casos reportados de forma oficial por el Gobierno de Guatemala.
Esperan represalias por denunciar
Preguntamos a las denunciantes si estaban con temor de recibir represalias luego de hacer pública esta situación en el Hospital Roosevelt y esto nos contestó:
“Estamos conscientes que pueden haber represalias, lo platicamos, pero estamos dispuestas a correr el riesgo, no podemos recibir una mayor sanción que estar condenados a muerte, tenemos claro que pueden actuar en contra de nosotros pero el amor hacia nuestras familias nos hace hacer esto”
El 15 de marzo recién pasado, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social hizo llegar al personal de salud una circular en donde se les prohíbe “la difusión no oficial en redes”, es decir no pueden emitir opinión en redes sociales ni medios de comunicación sobre la situación en cuanto al Covid-19. Luego de la entrevista, esta circular fue reenviada a las y los trabajadores del hospital Roosevelt.
En el chat oficial para prensa en donde se encuentra Ana Lucía Gudiel, vocera de este ministerio; Carlos Sandoval, vocero de la Presidencia y otros trabajadores del MSPAS, se niegan a dar respuestas sobre las interrogantes de periodistas sobre temas de interés de toda la población, incluso han bloqueado a periodistas, tratado de forma irrespetuosa a quienes preguntan sobre datos que deberían de ser públicos.
Q. 6,500 millones para hacer frente a la emergencia
El 24 de marzo del 2020, el Presidente Alejandro Giammattei, autoridades del Ministerio de Finanzas (MINFIN), Banco de Guatemala (Banguat), Super Intendencia de Administración Tributaria SAT, el Crédito Hipotecario Nacional (CHN) y la Superintendencia de Bancos de Guatemala (SIB) informaron de las medidas financieras a tomar por el Gobierno de la República para hacer frente a la emergencia sanitaria por la Covid-19.
Entre préstamos aprobados, fondos de la nación, fondos emergentes aprobados y saldos de préstamos sin ejecutar el Gobierno de Guatemala cuenta con 6,500 millones de quetzales para hacer frente a la pandemia, sin embargo, en lo que va de la crisis se han recibido denuncias de distintos trabajadores de hospitales públicos que no cuentan con el equipo mínimo para trabajar, como el caso del Hospital Roosevelt y San Juan de Dios quienes se han atrevido a alzar la voz y a denunciar las precariedades con las que trabajan.
El Ministro de Finanzas González Ricci dijo: “es importante que los guatemaltecos conozcan que el Gobierno de la República está reparado con recursos para enfrentar esta emergencia”.
Reacciones después de la denuncia
Antes del cierre de esta nota nos comunicamos con el personal de salud, que hizo la denuncia y comentaron:
“Ya tenemos el apoyo del director, ya se les hicieron las pruebas a todo el personal de la cirugía donde está el compañero que resultó positivo. Dieron caretas que no se estaban dando en el hospital, se están dando en las áreas críticas que es donde más se necesita. Les dieron caretas a las 30 personas de cuidados intermedios de la pediatría para las que están de turno y dejaron para las que estarán de turno en los días siguientes. En la emergencia les dieron caretas a todos y también mascarillas N-95. Hoy a los médicos residentes los llamaron a reunión para darles equipo. Ya dieron mascarillas a la emergencia de adultos, a la emergencia de la pediatría, a intensivo, intermedios y el lunes nos darán N-95 a las cirugías”.
Intentamos comunicarnos con la dirección del Hospital Roosevelt para preguntar para cuánto tiempo tienen equipo ya que las mascarillas N-95 y algunos trajes son descartables, pero no logramos respuesta.
Foto: Cortesía personal Hospital Roosevelt
“Por aparte, nos ofrecieron ya 75 mascarillas que son mucho mejores a las que nos están dando en el hospital y vamos a cambiarlas por las que nos dieron el hospital que no sirven. Vamos a hacer un video y fotos de todo para que la gente sepa que no nos estamos quedando con nada y que llegarán a donde deben de llegar”
Además esta mañana una denuncia internacional fue publicada en la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres defensoras de derechos humanos (IM-Defensoras) y que está circulando en redes sociales, organizaciones y medios internacionales.
La encuesta que lo dice todo
La Universidad de San Carlos de Guatemala realizó una encuesta a 1,379 trabajadores de la salud en 21 departamentos del país, en la primera semana de abril del 2020, con el objetivo de monitorear si cuentan con el equipo de protección para hacer frente a la emergencia sanitaria por la Covid-19. Estos resultados, claramente evidencian que la mayor parte de las personas encuestadas no disponen de los insumos y equipo requerido para desarrollar de forma segura sus actividades en el área de salud en el MSPAS e IGSS y en un menor porcentaje en hospitales privados y muestra que las y los trabajadores que están en mayor exposición al virus son los que menos disponibilidad de equipo de protección tienen.
