Silvia Chuy, defensora de DDHH busca llegar al Congreso

Ella es candidata a diputada por el distrito de Chimaltenango. Nació en San Juan Comalapa y sería la segunda mujer maya Kaqchikel de su municipio en alcanzar una curul con la coalición Winaq-URNG. 

Silvia Griselda Chuy Chalí de 41 años busca llegar al Congreso de la República como diputada por el departamento de Chimaltenango. Es candidata en la primera casilla por la coalición Winaq-URNG. De ganar las elecciones sería la segunda mujer maya Kaqchikel, originaria de San Juan Comalapa en ocupar ese puesto legislativo.

Al ser consultada sobre su vinculación con el partido Winaq, asegura que fue la única opción que encontró para participar en política. “He trabajado de cerca con la sociedad, entender la vida de las mujeres y la importancia de su participación”, dijo. Mi deseo es trabajar en coalición con URNG y llevar la voz del pueblo al poder, de la cual no se escucha en el Congreso, agregó.

La candidata a diputada es madre con tres hijos y estudia actualmente la Licenciatura en Pedagogía e Historia del idioma Kaqchikel. Ha participado en varias organizaciones, asociaciones y movimientos sociales ocupando distintos cargos.

En las elecciones de 2019 se postuló por primera vez como candidata a diputada por el partido Winaq en la tercera casilla, sin embargo, no logró llegar al Congreso. Chuy Chalí asegura que su experiencia en el área social le abrió la puerta a la política.

Actualmente colabora con la autoridad ancestral del municipio de San Juan Comalapa, lugar donde ella nació. También es la actual presidenta del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE) de segundo nivel y socia fundadora de la Asociación Medalla Milagrosa, quien brinda educación a la niñez y juventud de su municipio.

Chuy Chalí quien vuelve a participar por Winaq asegura que en el Congreso los pueblos deben estar representados. “Yo decidí participar para tener voz en el Congreso, para hablar por las necesidades y realidades de los pueblos, para hablar de lo que somos y quienes cohabitamos este país”, expresó.

Respecto a su participación como mujer, dijo. “Hay que tener claridad de nuestra identidad, de ver qué queremos hacer y cómo hacer. Debemos analizar si esa participación va a representar al pueblo y no a los intereses personales. En el Movimiento Político Winaq, soy la secretaria departamental y eso me ha permitido trabajar por las mujeres y la sociedad”.

Sobre el actual proceso electoral y las exclusión de candidaturas por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y las cortes del país, indicó que este órgano electoral “ha actuado de forma arbitraria excluyendo a candidatos, como al Movimiento para la Liberación de los Pueblos (MLP). En su momento, el partido pudo trabajar otra acción en cuanto a su asambleas, pero las dirigencias nacionales son las que toman las decisiones, ellos seguramente al tomar esa decisión de no repetir una asamblea, están enfrentando al sistema”.

De su línea de trabajo se concentró en cuatro: priorizar a las mujeres, la juventud, la niñez y legislar por los derechos de los pueblos indígenas. “En la actualidad no se nos escucha tampoco se nos respeta, sabiendo que como pueblos somos importantes para el país, pero lamentablemente vemos como el Estado viola nuestros derechos como pueblos originarios y eso limita nuestro desarrollo”, aseveró.

¿Por qué la gente debe votar por tu persona? Respondió que por su trabajo social. “La vida me ha permitido conocer y trabajar por el pueblo. Hoy tienen la opción de tener una voz más en el Congreso para incidir juntos en el desarrollo de Chimaltenango”, concluyó.