Periodista y autoridad comunitaria Tz’utujil fue atacado en Santiago Atitlán
Diego Petzey señaló que él y su familia fueron atacados por la espalda por un hombre que fue identificado como José Alberto Ponce. Dos familiares del periodista resultaron con heridas de gravedad en el rostro, el oído y en la cabeza.
El corresponsal de Prensa Comunitaria en Sololá, Diego Petzey Quiejú y dos integrantes de su familia fueron atacados anoche en Santiago Atitlán, su lugar de origen. El agresor fue identificado como José Alberto Ponce.
El periodista Diego Petzey Quiejú, maya Tz’utujil es secretario del Comité de Playa del cantón Panaj, una organización comunitaria que busca resguardar y proteger las orillas del lago de Atitlán, en Santiago Atitlán, Sololá.
El periodista y sus dos familiares fueron atacados por la espalda por Ponce quien utilizó un objeto punzo cortante. Los familiares de Petzey fueron trasladados por los Bomberos Voluntarios, quienes les dieron los primeros auxilios y luego fueron atendidos en el Hospitalito de Santiago Atitlán.
Petzey comentó vía telefónica que, sus dos familiares resultaron con heridas de gravedad en el rostro, oído y en la cabeza, con heridas que les implicaron 20 puntos de sutura, “uno de ellos casi pierde el oído izquierdo”, afirmó Petzey.
El ataque ocurrió a un costado de la iglesia católica. Testigos confirmaron que Ponce se lanzó a atacar a los dos familiares del periodista por la espalda, lo identifican como dueño de una cantina cerca de la playa del lago. En la cuenta de Facebook del comercio Antojitos Aury, aparecen fotografías del agresor como supuesto propietario de ese comercio.
“Aún no entendemos por qué este sujeto se lanzó a atacarnos por la espalda”, comentó el periodista Petzey.
Los vecinos afirman que el agresor no es originario de Santiago Atitlán y que ha intentado apropiarse de la orilla de la playa frente al lago de Atitlán, lo que ha generado el rechazo de la población maya Tz’utujil y sus autoridades comunitarias en ocasiones anteriores.
Varios agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) de la subestación 72-31 estuvieron presentes mientras eran atendidos por los bomberos, pero no detuvieron a José Ponce, quien, permaneció en el lugar de la agresión. Los policías justificaron que no estuvieron en el momento del ataque, razón por la cual, no podían detener al agresor, a pesar de la denuncia verbal del periodista.