Las últimas palabras de Virginia Laparra antes de su sentencia
Falta un día para conocer la sentencia contra Virginia Laparra. El Ministerio Público (MP), de donde ella fue fiscal destacada, pide que se le den 8 años de prisión por “abuso de autoridad continuado”. Por primera vez en los cinco días de audiencias, la exfiscal quetzalteca contó cómo ha sido objeto de persecución desde el 2017 por parte de quienes ahora la denuncian.
“Hacía mi trabajo por amor a mi país”
En la audiencia previa a su sentencia Virginia Laparra solicitó a la jueza Oly González hacer uso de su derecho de última palabra.
Durante 45 minutos, la exfiscal explicó cómo este proceso la llevó de ser una funcionaria que investigaba casos de corrupción, a ser objeto de venganza y criminalización por parte de un juez, un abogado y una fundación que, aseguró, es para infundir terror. Sus nombres: Lesther Castellanos, Omar Barrios, y la Fundación Contra el Terrorismo (FCT) de Ricardo Méndez Ruiz y Raúl Falla.
Laparra aseguró no haber perseguido a ningún juez, contrario a lo que los querellantes adhesivos habían planteado. “Desde 2017 hasta hoy, la perseguida he sido yo”, señaló. Narró cómo, desde entonces, Barrios y Castellanos han dedicado gran parte del contenido que publican en redes sociales a la exfiscal. Fueron ellos quienes buscaron a los medios de comunicación por primera vez para hablar sobre el tema.
Durante su intervención, Omar Barrios aseguró haber visitado la oficina de Laparra en una ocasión para “ayudarla” y “explicarle lo que estaba haciendo mal”. Sin embargo, le exfiscal señaló que, durante su visita, el abogado la había amenazado y exigido que removiera su nombre de los documentos que acompañaban las denuncias. “Me dijo: su trabajo es intachable, usted tiene valores. Yo no”, narró Laparra.
La petición de Virginia Laparra a la jueza Oly González fue firme: que haga justicia en este caso. “Mis derechos ya han sido violados muchas veces”, señaló.
Lesther Castellanos, en su intervención, hizo referencia a cómo durante el holocausto de la segunda guerra mundial, eran los jueces quienes enviaban a las personas a campos de concentración. Virginia Laparra señaló que estas acciones eran ilegales. “Como decía Viktor Frankl, “quieres un por qué, encontrarás un cómo”. Yo tengo un por qué: mis hijas y mi país, y es por eso que he llegado hasta aquí”, finalizó.
Vulneraciones contra Virginia
En su intervención, Virginia Laparra narró cómo ha padecido distintas enfermedades desde antes de este proceso en su contra, las cuales se agravaron con la prisión. En las audiencias de etapa intermedia, donde no se permitió el acceso de la prensa, la abogada cuenta que los querellantes se reían cuando ella solicitaba atención médica y era enviada al hospital general.
Virginia señala que durante el proceso no ha habido igualdad, porque otros casos donde se acusa a funcionarios de corrupción “se les da medida sustitutiva en la primera audiencia, mientras a mi me tienen presa por 10 meses”.
Además, menciona que se ha limitado su derecho de defensa, puesto que ella fue aprehendida justo un día antes de tener la primera audiencia por este caso. Es decir, que no se le dio oportunidad de declarar e inmediatamente se le trasladó a Guatemala en calidad de detenida.
Asimismo, los querellantes han utilizado declaraciones de Virginia como pruebas en su contra durante el proceso, como la carta abierta que ella escribió en abril de 2022, o por contar en medios de comunicación su historia.
¿Por qué se define este caso como criminalización?
Desde el inicio de este proceso, las abogadas de Virginia y ella misma han afirmado que este se trata de un proceso de criminalización contra la fiscal y una venganza contra la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (Feci) y la antigua Comisión Internacional Contra la Impunidad (Cicig).
Laparra aseguró que se está utilizando el derecho penal para condenarla antes de ser juzgada, como se pudo observar por el hecho de estar en prisión preventiva durante 9 meses. “Yo estoy aquí porque no me fui. La Fundación Contra el Terrorismo no es tal, es para infundir terror. Desde 2020 decían que me estaban cocinando una orden de aprehensión ¿salí corriendo? No, estoy aquí. No me fui”, dijo la exfiscal a la jueza González.
Además, mencionó que durante todo el juicio los querellantes han lanzado mensajes en contra de la Cicig, y que hoy están realizando una venganza por no estar de acuerdo con el trabajo de esta comisión en su momento.
Las peticiones
La jueza Oly González escuchó las peticiones de los querellantes adhesivos del caso. Lesther Castellanos, antes de presentarlas, cuestionó qué es la independencia judicial. “Somos los jueces quienes debemos poner un límite al poder”, señaló. Además, aseguró que no se trataba de un acto de venganza contra la exfiscal.
“La doctora Laparra me trató con justicia y abusó de su poder, ahora usted trátela con justicia”, pidió. Omar Barrios secundó esta solicitud y pidió que se defiendan los derechos humanos, especialmente el derecho a la libre emisión de pensamiento y la independencia judicial.
A la espera del veredicto
Finalmente, Virginia Laparra solicitó a la jueza que resuelva con justicia y revise los documentos presentados por todas las partes. Aseguró que no se arrepiente de su trabajo y que siempre actuó con la verdad.
A la salida, abrazó a su mamá y se despidió de todas las personas que la han acompañado. La sentencia se dictará el 16 de diciembre a las 13:00.