El monumento de Luz María brillará en la Avenida Simeón Cañas

Más de dos años han pasado desde el femicidio de Luz María López Morales. Durante este tiempo, la búsqueda por justicia de su familia logró que Jorge Zea, su esposo, fuera sentenciado a cincuenta años de prisión inconmutables. El 9 de febrero del 2023, el Estado colocó un monumento en su honor en el lugar donde su cuerpo sin vida fue encontrado. Ahora, la Avenida Simeón Cañas se llenó de luz. 

“El femicida convirtió este lugar oscuro en uno lleno de luz”, expresó Ada Morales, madre de Luz María, el 9 de febrero del 2023 durante el acto conmemorativo en honor a su hija. A él asistieron representantes del Instituto de la Víctima, quienes acompañaron a la familia durante el proceso judicial. También participaron autoridades del  Organismo Judicial (OJ) y la Corte Suprema de Justicia, quienes entregaron un reconocimiento a Ada, su esposo, Byron, y su hijo por su lucha. 

La familia de Luz María recibe el reconocimiento. / Fotografía: Kristhal Figueroa

En el acto, se inauguró un monumento en honor a Luz María. Este fue una de las medidas restaurativas dictadas por el tribunal que sentenció al femicida de Luz María. En la placa, se lee: “Aquí fue encontrado el cuerpo de Luz María del Rocío López Morales por lo que se conmemora y se reivindica el derecho que tienen las mujeres a vivir libres de violencia, que la lucha continúe… Ni una más”. 

Para la familia de Luz María, el proceso no ha sido fácil. Por medio del monumento, buscan que se conozca la condena justa que lograron y que es posible alcanzar la justicia si se denuncia. “Simboliza los altos y bajos que hemos atravesado. Representa nuestra lucha y que estamos a la espera de que la sentencia esté firme”, señaló Ada. 


Desde que inició el proceso, distintas personas se han acercado a la familia López Morales para conocer cómo es el proceso de búsqueda de justicia por casos de violencia contra la mujer. “A raíz de toda esta tragedia, se ha ayudado a muchas mujeres”, explicó Ada. Por este motivo, y a pesar de lo vivido, manifestó sentirse satisfecha. 

El caso

Una alerta Isabel-Claudina fue activada el 20 de enero del 2021 en la Ciudad de Guatemala. Anunciaba la desaparición de Luz María del Rocío López Morales, una joven de 25 años, madre y trabajadora del Modelo de Atención Integral de Niñez y Adolescencia (MAINA) del Ministerio Público (MP). Dos días después, el 22 de enero, su cuerpo sin vida y con señales de violencia aparecería en un tragante al final de la Avenida Simeón Cañas. 

Luz María se convirtió en una de las 660 mujeres asesinadas durante el 2021, según datos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF). Fue así como la búsqueda incansable por la justicia de su familia, especialmente de su madre Ada Morales, comenzó. El 23 de enero del 2021, la Policía Nacional Civil (PNC), junto a fiscales del MP, capturó al principal sospechoso del femicidio: Jorge Zea, quien era su esposo. 

Más de un año y medio después, el 26 de julio de 2022, inició el juicio contra Jorge Zea por el femicidio de Luz María. Durante tres meses, el tribunal se reunió para escuchar a las y los testigos y observar la evidencia material y documental presentada que permitiría comprobar la hipótesis del MP. El 11 de octubre, se emitió la sentencia. 

Jorge Zea fue sentenciado a 50 años de prisión por el femicidio de Luz María López Morales, la pena máxima para este delito. El tribunal afirmó que el asesinato era la cúspide de una espiral de violencia machista expresada de distintas maneras y en distintas facetas, como la física, psicológica y económica. Reconocieron, también, a la hija de la pareja como agraviada del crimen. Según el Instituto de la Víctima, fue una “sentencia histórica” debido a la rapidez con la que fue lograda. 

Días después del dictamen de la sentencia, el tribunal estableció medidas restaurativas para la familia de Luz María, a quienes reconoció como víctimas colaterales del femicidio. Su hija continuará con terapias psicológicas y accederá a una beca educativa. También se otorgaría una compensación económica por los daños. Se establecieron, también, acciones institucionales para la “no repetición", entre las cuales se encuentra la revisión de la difusión de las rutas de denuncia por violencia contra la mujer. 

“¡Luz María, no te hemos olvidado!” 

El acto de conmemoración finalizó con una intervención de las Niñas de la Asociación Coincidir. Cantaron y bailaron al ritmo de su batucada, exigiendo vidas libres de violencia para las niñas y mujeres. Finalizaron con una consigna en honor a Luz María: “¡Luz María no te hemos olvidado, ahora nosotras hablaremos!”

Las niñas rodearon a Ada Morales con un abrazo, quien les agradeció por asistir. La Asociación Coincidir ha acompañado a la familia López Morales desde el inicio del juicio. “Me siento muy acompañada por ellas. Creo que están aquí conmigo por mi nieta, la hija de Luz María, quien también es una niña afectada por esto”, explicó. 

Las niñas de la Asociación Coincidir durante su intervención en la conmemoración. / Fotografía: Kristhal Figueroa


La apelación a la sentencia 

La sentencia por el femicidio de Luz María aún no se encuentra firme. El sentenciado, Jorge Zea, decidió presentar una apelación, la cual será resuelta el 23 de marzo del 2023. Mientras tanto, la familia de Luz María continúa siendo intimidada por allegados a Zea. “Pero no tengo miedo, continuaré luchando porque la sentencia sea firme”, finalizó Ada Morales.

Kristhal Figueroa

Periodista y socióloga en formación. Interesada en narrar la situación de las mujeres, movimientos sociales y juventudes. Feminista de la periferia de la Ciudad de Guatemala. Becaria de la International Women’s Media Foundation e integrante de la octava generación de la #RedLATAM de Distintas Latitudes.

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