Coline Fanon: robar la identidad de un niño o niña es de los peores delitos del mundo
La semana del 22 al 27 de abril, el Parlamento Europeo aprobó una legislación para combatir la trata de personas y proteger a las víctimas. Esta normativa considera delitos a nivel de la Unión Europea, el matrimonio forzoso, la adopción irregular y la maternidad subrogada para la explotación reproductiva.
Por Mariela Castañón
Para conocer la opinión de una de las víctimas de trata de personas en la modalidad de adopción irregular, Ruda entrevistó a Mariela Coline Fanon, una mujer guatemalteca que fue robada del Hospital Roosevelt cuando era una bebé y posteriormente fue dada en adopción en Bélgica, mediante un proceso irregular en 1987.
Coline Fanon, también autora del libro “Mamá, no estoy muerta”, explicó lo que para ella significa esta normativa, que califica como “un alivio para las víctimas”.
Ruda: ¿Qué significa para usted, una víctima de adopción irregular, la legislación contra la trata aprobada por el Parlamento Europeo?
Mariela Coline Fanon: Esto es un verdadero alivio para las víctimas. Por un lado, la mayoría de los países europeos no reconocen las adopciones ilegales, así que el hecho de que los Estados se involucren tiene sentido por definición para las víctimas. La respuesta que recibimos de las víctimas es que todas pensaban que era imposible. Aquí en Europa asociar adopción y trata de personas es algo que cuesta oír.
Ruda: ¿La entrada en vigencia de esta normativa tendría algún impacto para las y los guatemaltecos que fueron, o han sido adoptados irregularmente en Europa?
Mariela Coline Fanon: El impacto de las adopciones pasadas sí en términos de justicia. Europa da a sus Estados miembros dos años para adaptar su legislación. Podemos ver esto desde una perspectiva legal por el momento.
Más en términos de cooperación interna europea. Personas sospechosas de adopción ilegal se han trasladado a Europa. Por ejemplo, cuando una agencia cerraba sus puertas podía transferir sus activos materiales y/o financieros a una agencia en otro país, pero, por ejemplo, los niños guatemaltecos víctimas de adopción ilegal en los años 80 en Francia, Holanda, Alemania o Suiza fueron traídos de vuelta por las mismas personas de una agencia belga. Una agencia francesa también trajo niños a Bélgica.
Ruda: A partir de ahora, en la Unión Europea se consideran delitos: el matrimonio forzoso, la adopción irregular y la maternidad subrogada para la explotación reproductiva ¿Por qué cree que es importante castigar estos delitos?
Mariela Coline Fanon: Personalmente, respondería que robar la identidad de un niño (o niña) es, para mí, uno de los peores delitos del mundo. Quitarle las raíces a alguien es condenarlo a navegar en la oscuridad por el resto de su vida.
Colectivamente, diría que las personas que deseen tomar el camino de la justicia deben hacerlo. Antes esto no era así. Y cada país tiene su propio Código Penal, lo que no significa que esto sea posible de la noche a la mañana. Pero asociar estos crímenes con la trata en términos del derecho internacional abre otra perspectiva.
Ruda: Antes de la aprobación de la ley contra la trata en Europa, ¿tuvo algún acercamiento con diputados del Parlamento Europeo? Si fue así, ¿qué planteó a los diputados?
Mariela Coline Fanon: Sí, nuestra fundación Raíces Perdidas ha sido recibida por varios diputados europeos. Esta ley surge después de una larga lucha. Recuerdo haber sido escuchada junto a nuestro exprocurador de Derechos Humanos, Jordán Rodas, por la delegación española. Pedimos que Europa tuviera una postura para obligar de alguna manera a los Estados miembros a hacer lo mismo. Como también hicimos ante las Naciones Unidas y gracias a la sociedad civil, las instituciones están tomando conciencia de la magnitud de la trata. Somos una prueba viviente de este tráfico y cuando los agentes se encuentran con nosotros en persona y escuchan nuestras historias, les da otra dimensión. La ruta del dinero proveniente de adopciones ilegales es una vía importante. Los padres adoptivos europeos muchas veces pagaban a los guatemaltecos en cuentas bancarias en Estados Unidos, pero en ocasiones el dinero circulaba a través de cuentas en Europa de un país a otro. En materia de visas también, para intentar volver sobre el camino de los niños guatemaltecos. Por ejemplo, algunos niños franceses llegaron a Bélgica y luego partieron hacia Francia sin que se supiera.
Ruda: ¿Qué acciones ha realizado en la actualidad la organización Raíces Perdidas que usted dirige, en el tema de adopción irregular?
Mariela Coline Fanon: A nivel belga, solicitamos el reconocimiento de las adopciones por parte del Gobierno, el Poder Ejecutivo. El Ministro de Justicia acaba de decir hoy en el Pleno que está dispuesto a hacerlo. Estamos retrasados porque llevamos años luchando y el parlamento belga (Poder Legislativo) nos reconoció como víctimas y presentó una disculpa pública. El 8 de mayo de 2024 finaliza la legislatura en la política belga, por lo que esperamos y haremos todo lo posible para que se realice antes de esta fecha.
A nivel europeo veremos cómo se implementa todo en materia legal y luego aprenderemos sobre los campos de aplicación para tal vez modificar aún más las leyes en Bélgica.
A nivel de Naciones Unidas seguimos, pero haber logrado obtener esta declaración universal que nos reconoce a nosotros y a nuestras familias guatemaltecas como víctimas de crímenes de lesa humanidad, ha sido una de las cosas más importantes.
El último paso histórico e importante fue el 5 de abril, fuimos ante la Comisión Presidencial de la Paz y de los Derechos Humanos para pedir que se abriera la comisión de la verdad de los niños (y niñas) desaparecidos (adopciones ilegales).
La búsqueda de familias sigue siendo nuestra prioridad, pero el trabajo sustantivo a nivel jurídico es universal.