Cirugía plástica, un riesgo para la vida de las mujeres
Arte: Angie Ross
El Tribunal Segundo de Sentencia Penal absolvió al cirujano plástico Néctor Humberto Estrada, quien fue acusado por el Ministerio Público (MP) como responsable de la muerte de Gema Sagastume, de 24 años, quien había acudido a su clínica en el 2019 para someterse a una liposucción y falleció en el procedimiento. Para el juez Raúl Ramírez, las acusaciones no fueron suficientes.
Por Ana Alfaro
El caso de Gema es el segundo caso que ha salido a luz y ha llevado a Tribunales a médicos guatemaltecos que se dedican a lucrar con la cirugía plástica, práctica médica en la que han fallecido las pacientes, por lo que sus familiares buscan justicia.
El otro caso fue el de Floridalma Roque, quien acudió en el 2023 a realizarse un procedimiento estético con el cirujano plástico Kevin Malouf Sierra. Este enfrenta un proceso legal por la desaparición de Floridalma luego de que ella ingresara a su clínica.
Al consultar a dos especialistas en psicología, ambas concuerdan en que los hombres que después de acabar con la vida de mujeres desechan sus cuerpos, podrían ser calificados con patrones de personas narcisistas, egocéntricas y psicópatas; pero que cada caso debe verse individualmente. “Los orígenes son heridas de infancia, donde se van dando este tipo de patrones conductuales, que en algunos casos se vuelven patológicos. Los casos en los que se vuelven más patológicos son los cirujanos, cuando empiezan a perder la sensibilización humana”, indicó la psicóloga Saraí Perrusquía.
El cirujano Néctor Estrada aparece en el sitio Findoctor.com como cirujano plástico, con número de colegiado #5,267 así como el perfil de su clínica “Imagen centro estético integral”, ubicada en la 3 avenida 14-69 zona 14. Esto a pesar de que ya tiene un año de estar inhabilitado para ejercer, y con petición del juez para que el Colegio de Médicos mantenga vigente esta medida.
La madre de Gema, Mara López, mencionó que espera continuar el proceso de búsqueda de justicia para su hija. “Aunque el juez absolvió al doctor, creo que todavía hay muchos recursos que él mismo indicó. Creo que la investigación que se hizo al inicio de la escena del crimen no fue buena y él mismo dio la guía. También mandó a que se investigue dentro del Colegio de Médicos para que se inhabilite”, dijo a los periodistas después de que el juez liberara al acusado.
Sobre los precios que pueden alcanzar las cirugías plásticas, preguntamos a tres mujeres que han acudido a estos procedimientos, y argumentan que sus gastos oscilaron entre Q25 mil hasta Q50 mil quetzales, en algunos casos incluye el día de hospitalización, honorarios médicos y medicina. En el caso de Malouf Sierra, una mujer contó que como parte de los requisitos, ella tenía que acudir también al psicólogo para optar a la cirugía.
Fernanda* es una mujer de 34 años, diagnosticada con diástasis abdominal, que consiste en la separación de los músculos rectos del abdomen. Al ser una madre joven se lastimaron sus músculos, algo que se agravó al tener dos hijos más. “Cuando tuve mi primer bebé tenía 16 años, tuve una ruptura brusca de los músculos abdominales y una hernia umbilical. Y al retirarme la hernia por no ser estética, me dejaron dañado el ombligo”.
Ante esta situación, Fernanda acudió a realizarse una cirugía estética, “busqué un cirujano plástico, fue un proceso largo pues tienen mucha demanda y me dieron la consulta hasta los 3 meses. Me ordenó estudios médicos, sangre, orina y heces, diez días antes de la cirugía”, contó. En el proceso también se realizó un aumento mamario.
Ella logró encontrar a un médico de esta rama por recomendación de su ginecóloga, quien fue la primera médica con la que acudió. Han pasado varios meses después de esta experiencia y aseguró que como toda cirugía, es un riesgo que se toma.
Mala práctica médica
Para la cirugía estética que buscaba Gema, el médico le solicitó únicamente un examen de sangre y cuando se desarrolló el procedimiento, según la madre, este duró cinco horas. Al pasar ese tiempo el médico salió del quirófano y le indicó que había habido un problema y que su hija había fallecido. Durante la reducción de cintura por medio de la liposucción abdominal, Gema sufrió una hemorragia que al complicarse provocó una embolia pulmonar.
Las clínicas a las que se contactaron para conocer los requisitos que solicitan para hacer el procedimiento no comparten tan fácilmente la información, ya que solo el doctor puede darla en consulta. Pero a las mujeres que consultamos, aseguraron que son exámenes de sangre y verificar que la persona no sea hipertensa.
La clínica de Estrada no contaba con banco de sangre y el cirujano tampoco tenía el colegiado activo. Además, una especialización de Cirugía Plástica que hizo en México no figura registrada en el Colegio de Médicos y Cirujanos, de acuerdo una publicación realizada por La Cuerda. Al momento del fallecimiento de Gema, se retiró y no rindió declaraciones para la investigación.
Se trató de obtener información con el Colegio de Médicos de Guatemala sobre cómo las personas pueden saber si un médico está habilitado para ejercer su profesión, ya que en su página web, con escasa información y desactualizada, solo hay un apartado para los colegiados, pero solamente la persona que tiene el número de colegiado y la clave de acceso puede verificar esta información.
Ante este panorama, se trató de comunicar vía telefónica y vía correo electrónico con esta entidad, pues indicaron que era la única forma que tienen autorizada para brindar información, pero argumentaron que no podían darla hasta que la junta directiva se reúna y vean la solicitud.
La junta directiva se reúne cada jueves y este último jueves hubo otra actividad, por lo que han demorado y denegado en dar la información a este medio.
Son cuatro las denuncias que el cirujano Néctor Humberto Estrada tiene en el MP, una por el caso de Gema y tres más por lesiones culposas.
En internet hay sitios que también divulgan la diferencia de precios que existen para cirugías plásticas en Estados Unidos, México y comparándolos con los de Guatemala, hay diferencias de casi el doble. En Estados Unidos se cotiza entre los $8 mil dólares una abdominoplastia, en México $4 mil 500 y en el país, $6,000.
Caso Floridalma Roque
Después de un año de búsqueda y un mes de identificación del cuerpo, el MP confirmó este 16 de junio que los restos humanos encontrados en una finca, en San Vicente Pacaya, Escuintla, corresponden a Floridalma Roque.
Floridalma vino de Estados Unidos a la clínica del cirujano plástico Kevin Malouf para hacerse una cirugía plástica el 13 de junio de 2023, pero según las investigaciones ella murió en el procedimiento.
La mujer fue reportada como desaparecida por sus familiares al no tener conocimiento de su paradero, ya que el cirujano Kevin Malouf Sierra dijo que ella se había retirado después de la cirugía en un carro que pidió por medio de una aplicación.
En el caso también están involucrados personal de apoyo médico; entre ellos Luis Castro Molina, Susana Emilia Rojas Cruz y Lidia Silva Moreira. Durante el desarrollo del caso se conoció que el cuerpo de la paciente fue desmembrado y posteriormente colocado en un barril.
Tras meses de búsqueda, los hijos de Floridalma Roque acudieron al Congreso de la República para dar a conocer que el cuerpo de su madre fue localizado, y pidieron al juez que lleva el caso que se haga justicia, y que el acusado sea llevado a una verdadera cárcel para que no goce de los privilegios que obtiene en el centro de detención Mariscal Zavala donde está actualmente, mencionaron.
Malouf Sierra no solamente enfrenta este caso, también tiene otra investigación abierta por la muerte de otra paciente.
En el Congreso los hijos de Floridalma estuvieron acompañados del diputado Byron Rodríguez, de la bancada Todos. El legislador aprovechó el momento y planteó que propondrá una iniciativa de ley con el nombre de Floridalma Roque, para que los médicos estén registrados en el Ministerio de Salud para que cuenten con registro sanitario, tarjetas de salud y licencias.
Luego de leer estos casos, cabe que las mujeres nos preguntemos si realmente vale la pena arriesgar la vida para cumplir con los patrones de belleza que están siendo inculcados desde hace varias décadas y tienen un gran bombardeo en las redes sociales. Esta debe ser una reflexión para todas nosotras. No necesitamos cumplir con ningún estereotipo para sentirnos bellas.
Fernanda* nombre ficticio para resguardar la identidad de la entrevistada
