Así afecta la depresión posparto a las mujeres
La depresión posparto afecta a una mujer luego de dar a luz a un bebé y aparece en los primeros tres meses o incluso un año después. En Guatemala el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) ha identificado 48 casos en la red hospitalaria pública, en un periodo de seis años, sin embargo, especialistas consultadas coinciden en que este dato no refleja la realidad y es un subregistro.
Por Mariela Castañón
Ana Lucía Ramírez tenía 24 años cuando dio a luz a su primer bebé. Trabajaba en un medio de comunicación como periodista; su embarazo cambió varios aspectos de su vida cotidiana, que le afectaron.
Uno de los primeros desafíos que enfrentó Ana Lucía durante este proceso fue el cuestionamiento por ser madre. A eso se sumó las complicaciones en salud como la preeclamsia (complicación en el embarazo, que puede provocar presión alta).
Pero eso no fue todo, además de los dolores que le provocaron la cesárea después de dar a luz, no lograba amamantar a su bebé, porque no tenía leche. Esto la llevó a buscar asistencia médica al Hospital General San Juan de Dios (HGSJDD), pero lo que encontró fueron comentarios despectivos del doctor que la atendió, “un médico se burló de mí porque yo no tenía hecho el pezón. Que mujer tan ignorante”, me dijo, relata la entrevistada.
Los retos en su vida laboral, los cuestionamientos por su embarazo y por no responder a los estereotipos de lo que debería ser una “buena madre”, provocaron que Ana Lucía se descuidara físicamente, incluso llegó a pesar cerca de 200 libras, dice. Tampoco tenía deseos de arreglarse, ni ánimo para seguir adelante.
“Yo no me arreglaba. Andaba despeinada, no me perfumaba. Era un cúmulo de emociones. Estaba enojada, frustrada”, explica.
De acuerdo con Andrea Cabrera-Lara, psicoterapeuta, asesora parental y mamá de tres, la depresión posparto puede ser de moderada a intensa y afecta a una mujer luego de dar a luz.
“Puede ser que la depresión posparto aparezca meses después, pensamos que puede ser de manera inmediata al parto, pero a veces las hormonas no funcionan como esperamos, de hecho, se atrasan. No solamente por temas hormonales, sobre todo después de un primer parto la mujer se da cuenta que su vida cambió, tiene poco apoyo para la crianza de su bebé, dificultades económicas, cuestionamiento de la identidad, etc.”, describe Cabrera-Lara.
Según el análisis práctico ¿Qué es la depresión posparto”? publicado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), algunos síntomas de la depresión posparto son: sensación de agobio, llanto persistente, falta de lazos de afecto con el bebé, dudas sobre la capacidad de cuidar a un recién nacido, baja autoestima, alteraciones en el sueño, falta de apetito, entre otros.
La psicoterapeuta Cabrera-Lara explica que es importante diferenciar la depresión posparto del “baby blues”, que es un trastorno del estado de ánimo que se refleja en tristeza en un 80% de las mujeres después de dar a luz a un bebé, pero que se resuelve en un promedio de dos semanas o un mes y medio, diferente a una depresión posparto que se da en un tiempo prolongado y se refleja en desesperanza, dificultad para conectar con el bebé y “mucha melancolía”.
Un tema del que poco se hablaba
Ana Lucía estuvo depresiva durante dos años (entre 2003 y 2005). En ese periodo de tiempo no identificó que sufrió depresión posparto, sino hasta años después. Ella cree que otras mujeres podrían estar padeciendo lo mismo, por eso considera que es necesario hablar del tema y difundir la información.
De acuerdo con el MSPAS, entre enero de 2017 a diciembre de 2022, que es el dato más reciente que posee, ha identificado 48 casos de depresión posparto, principalmente en los hospitales localizados en: Alta Verapaz, Baja Verapaz, Petén, Guatemala, Huehuetenango, Izabal, Jutiapa, Quiché, Quetzaltenango y Chiquimula.
En una solicitud requerida por medio de información pública, el MSPAS explica que cuando identifica un caso de esta índole, evalúa a la mujer afectada para determinar qué tipo de tratamiento requiere y el seguimiento del caso lo proporciona en un centro de salud, o visitas domiciliarias.
Para la psicóloga Mildred Hernández, estos casos pueden representar un subregistro y no reflejen la realidad, porque no se presta atención a la salud mental de las madres.
Cabrera-Lara coincide con Hernández, considera que existe un subregistro y opina que es importante hablar del tema y exponer que las mujeres no son “malas mamás” por no conectar de inmediato con su bebé. Y mientras más historias se difundan, existirá más posibilidad de apoyar a otras, “en la medida en la que juzguemos menos a las mujeres en la maternidad, habrá más oportunidad para que puedan expresarse”, indica
Así superó la depresión posparto
Ana Lucía superó la depresión posparto con el apoyo de uno de sus amigos periodistas a quien veía todos los días en la cobertura de justicia. Él la motivó a arreglarse, a valorarse y a enfrentar los desafíos con carácter y valentía.
Las sugerencias de Ana Lucía a otras mujeres que enfrentan depresión posparto son: “no se sientan las brujas del cuento”, por no despertar de inmediato el instinto maternal, conozcan sus derechos y no tengan miedo de hablar de lo qué sienten y piensan después de dar a luz a un bebé.
Por otro lado, la psicóloga Hernández, recomienda que cuando una mujer sufre esta depresión debe ser escuchada, comprendida y apoyada por su familia.
Mientras que la psicoterapeuta Cabrera-Lara reflexiona que “cuando nace un bebé, también nace una mamá”, que necesita atención y cuidados.
La profesional recomienda aplicar los lenguajes del amor: regalos y detalles, servicio en los quehaceres de la casa, contacto físico a través de un abrazo, hacer sentir bien a la nueva mamá, hablarle de otros temas y no limitarla a su maternidad. Concluye en la importancia de buscar ayuda de especialistas cuando ha sufrido depresión posparto.