Agresiones sexuales evidencian carencia de protocolos de seguridad en Municipalidad de Xela
Marvin Cifuentes, empleado cercano al alcalde de Xela es señalado de cometer agresión sexual dentro del despacho edil.
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Desde tempranas horas del viernes 6 de mayo, personal del Ministerio Público se presentó al edificio de la Municipalidad quetzalteca, con la finalidad de documentar la denuncia presentada el 5 de mayo.
La auxiliar fiscal a cargo de la diligencia solicitó ingresar a la oficina que utiliza Juan Fernando López, porque es el lugar señalado en donde ocurrió la agresión sexual. El personal de la comuna hizo esperar más de media hora a investigadores a pesar de ser una oficina de acceso público.
Según los detalles de la denuncia, el agresor es identificado como Marvin Estuardo Cifuentes Jimenez, actualmente tiene el cargo como asistente de alcaldía en asuntos administrativos.
La víctima; que es trabajadora municipal, denunció que Cifuentes la citó a una reunión en el despacho de alcaldía para hablar sobre un ascenso. Cuando ella se encontraba dentro de la oficina, Cifuentes le dijo que tenía que estar seguro de que no lo grabaría o le tomara fotos y procedió a tocarla, aparentemente buscando un micrófono o algún aparato de fotografía.
Luego del suceso ella acudió al MP para presentar la denuncia a pesar de la crisis nerviosa en la que se encontraba.
Carlos Martínez, abogado de la víctima, detalló que, al intentar ingresar a las oficinas, el personal municipal buscaba obstaculizar el trabajo y pedían una orden judicial.
“Esperamos que la Municipalidad colabore. Si notamos que algún funcionario público está interfiriendo, vamos a presentar una denuncia por obstaculización a la acción penal”, aseguró.
Actualmente la denuncia es por agresión sexual, pero según el abogado podría calificarse como violación en grado de tentativa, pero esperarán a que el MP defina el delito.
Las Denuncias
Este es el segundo caso que se conoce en una semana. El primero se dio a conocer luego de una publicación en redes sociales en la que una mujer detalló que, al participar en una actividad pública fue víctima de agresión sexual por dos hombres que se encontraban en el lugar.
La denunciante evidenció que la intentaron sobornar para evitar que procediera con una denuncia penal, además que la reacción de la Policía Nacional Civil al recibir la denuncia, le brindaron una atención precaria y sin darle la ayuda correspondiente.
La denuncia llevó a la captura de Fredy Bladimir Pérez Yax de 22 años y Melvin Vidal Pérez Yax de 25, este último es trabajador municipal. Ambos fueron ligados a proceso por el delito de agresión sexual; sin embargo, se encuentran libres hasta celebrar la próxima audiencia en agosto.
La dirección de comunicación social confirmó los hechos que ocurrieron en la actividad de celebración del Día de la Danza en el Teatro Municipal. Marck Juárez, vocero edil dijo que iniciaron una investigación para determinar por qué el empleado municipal se encontraba en ese lugar, ya que su puesto es como auxiliar de planillas y nóminas.
“Hago la denuncia pública porque en estos lugares debería existir seguridad y estaban en riesgo más mujeres y las niñas que se encontraban en la actividad”, aseguró la denunciante.
Sin protocolos de seguridad
Luego de estos hechos, la Municipalidad de Quetzaltenango no ha emitido ningún pronunciamiento o postura oficial.
El gerente Amilcar Rivas, afirmó que no cuentan con un protocolo de seguridad o reacción ante algún hecho de violencia de género. “Yo creo que talleres específicos dirigidos a estos temas es una cuestión pendiente que tenemos, también sería de ver qué reacciones podría tomarse ante una situación de esa naturaleza”, dijo.
Tanto el gerente municipal, como el comunicador catalogaron de “incidente” a la primera denuncia por la agresión sexual en el Teatro Municipal.
Cuando fue consultado por la segunda denuncia, Rivas dijo que no tenía ninguna postura oficial y desconocía los hechos, a pesar de que fue entrevistado por personal de la División Especializada en Investigación Criminal (DEIC).
Al cuestionarle por las acciones que tomarán como Municipalidad tras dos hechos denunciados respondió que mantienen el derecho tutelar del trabajador y para protección de las víctimas “son las garantías que ofrece el propio Estado. Como municipalidad tenemos un código de ética. Ya la prevención es otra situación que tiene que ver con la personalidad de cada individuo”, concluyó.
Martínez, representante de la segunda denunciante dijo que se notificó a la Municipalidad las medidas de seguridad de un Juzgado competente en la que se requiere la protección a la identidad e integridad de la trabajadora municipal, esto con el fin de que mantenga su estabilidad laboral y sobre todo el resguardo a su integridad física.
Niegan información de empleados
La dirección de recursos humanos de la Municipalidad de Quetzaltenango no ha brindado la información solicitada de los empleados que fueron señalados por estos hechos de agresión sexual. El director de la oficina Mario Solís, no se encontraba en su lugar de trabajo y Liz Ángela de León Santizo, subdirectora dijo que no podían brindar información sobre estos empleados.
Mencionó que el salario y el cargo se encontraba en la página web porque es información pública pero al consultarle el tiempo que Marvin Cifuentes lleva trabajando en la comuna dijo que era información sensible.
La dirección de comunicación social utilizó el argumento de protección a la víctima para evitar dar información sobre Cifuentes. “El abogado de la presunta víctima acudió a la dirección de recursos humanos para solicitar tácitamente que no se brindara información, de lo contrario tomarían acciones legales”, escribió el comunicador Marck Juárez, a través de una comunicación por Whatsapp.
Marvin Estuardo Cifuentes Jimenez actualmente tiene el cargo de asistente de alcaldía en temas administrativos bajo el renglón 022 con un salario líquido de Q11 mil 486.
Es mano derecha del edil Juan Fernando López y en el 2020 ingresó como su asesor en temas administrativos y financieros con un salario de Q10 mil 500.
Empleados municipales que evitan dar su identidad por temor a represalias, aseguran que Cifuentes decide a quienes contratar o no.