En Guatemala, aproximadamente 43 mil 782 personas contrajeron el VIH durante el año 2023. 1 mil 800 son niñas y niños. Las y los jóvenes, las personas indígenas y las mujeres amas de casa son algunas de las poblaciones más vulnerables ante el VIH y las infecciones de transmisión sexual (ITS), pero las numerosas carencias en las políticas públicas de prevención y tratamiento ponen en riesgo su salud y dignidad.

Por Jasmin López

Ante el alarmante aumento de nuevos casos de VIH y la ausencia de una respuesta adecuada por parte del Estado, la Coordinadora Nacional de Respuesta al VIH/ITS y la Red Legal y su Observatorio de Derechos Humanos VIH y PEMAR, instan a que la Iniciativa de Ley 6396 Ley Integral del Virus de Inmunodeficiencia Humana VIH sea aprobada de urgencia nacional.

Entre las acciones que la Iniciativa 6396 contempla están el acceso a las pruebas de VIH de forma gratuita, confidencial y voluntaria para las y los menores de edad (mediante la autorización de los padres, madres o tutores si son menores de 14 años) y la población en general, así como a los medicamentos antirretrovirales para las personas que viven con VIH; el tratamiento médico de emergencia para las y los sobrevivientes de violencia sexual, la implementación de normas de bioseguridad en los establecimientos cuya área de trabajo implique riesgo de transmisión del virus, y la difusión de información y métodos de prevención del VIH e ITS. Además, dicha iniciativa plantea la protección de los derechos humanos de las personas seropositivas, quienes son fuertemente discriminadas a causa de los múltiples prejuicios que existen sobre las ITS.

Gabriela Dávila, directora ejecutiva de Gente Positiva, mencionó que varios empleadores realizan pruebas de VIH sin el consentimiento de las y los trabajadores. Gente Positiva ha recibido reportes de estas prácticas discriminatorias e ilegales en Pollo Campero, la Escuela Politécnica y en call centers. 

Este proyecto, que fue presentado el 20 de mayo pasado, propone una reforma a los programas actuales de prevención y tratamiento del VIH recogidos en el Decreto 27-2000, los cuales, señalan las asociaciones que conforman la Coordinadora, no responden a las necesidades y contextos actuales de la población guatemalteca.

A pesar de que el idioma materno de un 30% de las y los guatemaltecos es de origen maya, solo existen campañas de prevención del VIH e ITS en español. Además, refirió Dávila, la mayoría del material informativo que se difunde es impreso, lo que lo vuelve inaccesible para los 2.3 millones de personas que no saben leer ni escribir. Estas carencias vuelven a las personas indígenas de áreas rurales más vulnerables a estas infecciones. El 65% de las y los indígenas son diagnosticados con VIH cuando ya se encuentran en fases avanzadas, de acuerdo a un estudio del Fondo de Acción Global para Infecciones Fúngicas.

El desabastecimiento constante en los hospitales y centros de salud, producto del mal manejo del Programa Nacional de Prevención y Control del VIH/SIDA por parte de la directora, y de la Comisión Multisectorial de Organizaciones (Conasida), es otra de las deficiencias que existen en el sistema de salud público para la prevención y tratamiento del VIH, dijo Dávila. Ella denunció que, el año pasado, se estuvieron dando pastillas molidas para adultos a las y los menores de edad  con VIH.

“En este momento, si tú vas al Programa Nacional de SIDA y preguntas si hay medicamentos, si hay condones, todo aparece en proceso. Y así hemos estado desde hace tres años”.

Otrans, Grupo de Apoyo Xela, Asociación LAMBDA, Gente Positiva, Redmmutrans y la Organización Mujeres en Superación son algunas de las organizaciones civiles que trabajan en la promoción de la Iniciativa 6396, la cual esperan que obtenga un dictamen favorable en el Congreso.

El panorama nacional del VIH

Los índices de transmisión maternoinfantil del VIH en Guatemala son los más altos de Latinoamérica. 1 de cada 4 personas embarazadas con VIH transmiten el virus a sus hijos e hijas, y menos del 40% de ellas reciben tratamiento preventivo, lo que permitiría bajar la probabilidad de transmisión a menos de un 5%. En el año 2023, el Programa Nacional de VIH del Ministerio de Salud registró 1 mil 800 casos de infección en niñas y niños. 

Las personas LGBTIQA+, las trabajadoras sexuales, las y los jóvenes son otras poblaciones en riesgo frente al VIH y las ITS. Se estima que, cada día, se presenta una nueva infección en jóvenes de 15 a 25 años. Las mujeres que son amas de casa son otro grupo que los y las integrantes de la Coordinadora Nacional señalan como población vulnerable. La mayoría de las mujeres que viven con VIH fueron infectadas por un hombre con el que tenían una relación estable. 

Guatemala es el departamento que concentra el mayor número de casos de VIH, con 14 mil 140, seguido de Escuintla, San Marcos e Izabal.