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Personas trans contarán con centro de atención especializada en Centroamérica

Foto: Colectivo Trans-Formación

El 28 de agosto, el Colectivo Trans-Formación celebró el comienzo de una nueva etapa con la inauguración de su sede, la cual es el primer centro de atención integral y diferenciada para personas trans en Centroamérica.                              

Por Jasmin López

Las nuevas instalaciones del Colectivo Trans-Formación, ya están listas para recibir a las personas de identidades disidentes y continuar con su labor en la formación, divulgación y promoción de los derechos de la población trans.

El lugar cuenta con oficinas, clínicas y salones, pensados como espacios seguros y respetuosos. Sylvio González, del equipo de Trans-Formación, comentó que aunque el colectivo inició como un proyecto dirigido a hombres trans, ahora  podrán atender también a mujeres trans y otras personas de la comunidad LGBTIQA+.

Trans-Formación proporcionará atención médica y psicológica integral e inclusiva; acompañamiento y cuidados afirmativos de género; asesoría jurídica gratuita en asuntos concernientes a la población LGBTIQA+, como el cambio de nombre legal y la defensa de sus derechos; y capacitación en derechos humanos. El colectivo cuenta también con una escuela de incidencia política para los hombres trans de Latinoamérica. 

Alex Castillo, presidente de la Red Centroamericana de Hombres Trans y coordinador general de Trans-Formación, indicó que este es el primer espacio de este tipo en Centroamérica, ya que las demás clínicas para personas trans se enfocan principalmente en la prevención y tratamiento del VIH y las infecciones de transmisión sexual, dejando fuera las demás necesidades de esta población. 

“Desde que fundé el colectivo, ha sido mi mayor lucha lograr que las personas trans cuenten con un espacio así, lleno de amor y seguro”, expresó.

La médica del equipo de Trans-Formación, Yusimil Carranza, en su nueva oficina. Foto: Jasmin López.

En la ceremonia de inauguración, a la que asistieron organizaciones civiles que promueven los derechos humanos y medios de comunicación, se reconoció a las mujeres trans como pioneras en la lucha por los derechos de las personas LGBTIQA+. En Guatemala, el asesinato de la mujer trans María Conchita Alonso fue lo que dio inicio a la que es considerada la primera marcha del orgullo LGBTIAQ+ en el país. Esta consistió en una caminata realizada por los amigos y amigas de María para denunciar el transfemicidio y la violencia estatal en contra de las personas de la diversidad sexual.

Foto: Jasmin López

11 años de resistencia 

El Colectivo Trans-Formación fue fundado el 13 de agosto del 2013, por Alex Castillo y Sylvio González. Alex y Sylvio descubrieron su identidad como hombres trans a partir de un estudio en el que participaron, que incluía una categoría para hombres trans. Antes de conocer el concepto de lo que es un hombre trans, ya se sentían cómodos viviendo y expresando  su identidad según lo considerado masculino. Durante el estudio conocieron a Gabriel y Sebastián, dos individuos trans masculinos. Sylvio y Alex encontraron que esta forma de auto nombrarse representaba sus identidades y experiencias, y de las conversaciones que sostenían con Gabriel y Sebastián surgió la idea de crear un grupo de apoyo para los hombres trans.

Jossel Cabrera, comunicador del colectivo, explicó que Trans-Formación “nació de la necesidad de transicionar y formarse, y de crear un espacio de información y acompañamiento para quienes tuvieran dudas sobre su identidad.”

La doctora Yusimil Carranza se integró al colectivo en el 2015, proporcionando atención médica integral y diferenciada a hombres trans y personas disidentes del género femenino asignado al nacer, servicio que nadie más ofrecía en el país, dijo Jossel.

Actualmente, dentro del equipo hay también una psicóloga, una nutricionista y una abogada, y han expandido sus servicios a otros países de Centroamérica y el Caribe. En Guatemala, realizan encuentros y jornadas de salud en los departamentos de Jalapa, Jutiapa, Huehuetenango y Zacapa, y su base comunitaria está conformada por 156 hombres trans.