La periodista y exconcejala de la Municipalidad de Joyabaj, Quiché, ratificó este martes la denuncia en contra del alcalde de ese municipio, Florencio Carrascoza y una solicitud de antejuicio promovida en su contra, luego de que fuera agredida físicamente y amenazada por él con un arma de fuego afuera de la municipalidad, en marzo de 2019.

En la audiencia que se realizó este día en el Juzgado de Femicidio y Violencia contra la Mujer de Santa Cruz, Quiché, Mejía rindió declaración de los hechos sucedidos el 14 de marzo de 2019 ante la jueza Merary Patzán Figueroa, cuando fue agredida verbal y físicamente por el alcalde y miembros del Concejo Municipal.

Ese día, Mejía relató que cuando llegó a la sala de reuniones del Concejo Municipal durante la tarde, Carrascoza se levantó y dijo a los demás miembros del Concejo que la reunión ya había finalizado.

De acuerdo con su testimonio, ella pidió una explicación de por qué terminaba la reunión si apenas estaba iniciando, luego los concejales empezaron a reírse y a burlarse de ella, como acostumbraban hacerlo.

Posteriormente, al salir del salón, los concejales comenzaron a insultarla y gritarle, en tanto el jefe edil la empujó. Ante ello pidió al secretario que mostrara los puntos abordados en la reunión y la lista de asistencia, pero este se negó señalando que tenía un jefe y que este le daba órdenes a él.

Ella salió a encontrarse con su esposo a quien le dijo que ya no quería seguir y le comentó lo que había sucedido. Llamó a su abogada para que la orientara, en ese momento vio que el alcalde salió del edficio de la municipalidad y le pidió a su esposo que lo grabara, por si él se acercaba. La abogada le recomendó que documentara y tomara pruebas.

De acuerdo con su relato, su esposo empezó a grabar y el alcalde se le fue encima y le gritó: “A mi no me grabes…y le tira la mano encima, luego me empuja a mí, me da un golpe en mi ojo derecho, yo le dije, ‘señor, no me golpee, usted no tiene derecho de tocarme’, me pone la pistola en la cabeza y me dice, ‘ahorita te voy a terminar maldita’, yo le dije ‘por favor señor, no me haga nada, yo no le he hecho nada a usted’”.

Entre lágrimas, Mejía relató que en ese momento no encontraba qué decirle y Carrascoza le dijo “Denuncie, a usted nadie le va a hacer caso” y ella señaló que iría a poner la denuncia en el Ministerio Público, a lo que él respondió, “hágalo, yo tengo poder, yo tengo pisto, a usted nadie la escucha, yo tengo comprada a la Fiscalía, tengo comprado a los jueces”.

La agraviada le pidió que la dejara tranquila y él se retiró. De inmediato fue a presentar la denuncia al MP y acudió al Hospital donde le hicieron exámenes y al siguiente día acudió al Instituto Nacional de Ciencias Forences (INACIF) donde le realizaron otros exámenes y le tomaron fotografías.

Mejía señaló a la jueza que no es la primera vez que ella fue víctima de maltratos, de señalamientos e insultos en las reuniones, ya que Carrascoza en varías ocasiones le mandó a callar y le decía “india, usted no tiene que hacer aquí, todo el tiempo me grita, vieja tonta, burra”, en tanto ella pedía que la dejaran hablar para poner sus puntos.

Aunque levantaba la mano nadie me dejaba hablar y así me callaban siempre todo el tiempo que pedía la palabra, relató.

La exconcejala señala que por esa situación ya no quería seguir y quería que se terminara el periodo para el que fue electa, ya que estaba cansada de tantos abusos y atropellos en su contra.

Mejía manifestó que siempre que acudía a las reuniones asistía con miedo de recibir los insultos y maltratos de parte de los concejales.

Mejía señaló a la jueza que no es la primera vez que ella fue víctima de maltratos, de señalamientos e insultos en las reuniones, ya que Carrascoza en varías ocasiones le mandó a callar y le decía “india, usted no tiene que hacer aquí, todo el tiempo me grita, vieja tonta, burra”, en tanto ella pedía que la dejaran hablar para poner sus puntos.

Aunque levantaba la mano nadie me dejaba hablar y así me callaban siempre todo el tiempo que pedía la palabra, relató.

La exconcejala señala que por esa situación ya no quería seguir y quería que se terminara el periodo para el que fue electa, ya que estaba cansada de tantos abusos y atropellos en su contra.

Mejía manifestó que siempre que acudía a las reuniones asistía con miedo de recibir los insultos y maltratos de parte de los concejales.

Presentan medios de investigación
Además de la declaración testimonial de Mejía, su abogada defensora Carolina Loarca, de la Asociación de Abogadas Indígenas Chomija’, presentó como medios de investigación en contra del alcalde un dictamen del INACIF, un informe de la psicóloga del Ministerio Público (MP) y del Hospital de Joyabaj, donde la exconcejala fue atendida.

“Anastasia Mejía es una mujer indigena maya k’iche’ que se atrevió a romper paradigmas, estereotipos y roles determinados para hombres como la participación en elecciones democráticas, siendo la primera mujer indígena que ocupa un puesto de elección popular dentro del Concejo Municipal al cual llegó a fungir como concejal séptimo, participación que se vio en desafío porque se considera por parte de sectores mayoritarios que la mujer no está preparada para ejercer esos cargos”, dijo Loarca.

El dictamen médico del INACIF realizado en el rostro de Mejía describe el golpe recibido. El informe de la psicóloga Mónica Mercedes Mérida, de la Fiscalía del Distrito de Quiché, indica “La señora Anastasia Mejía manifestó que no es la primera vez que agreden su integridad física y que es agredida verbalmente por todas las personas que integran el Concejo Municipal, en las reuniones que realizan, con ello se evidencia un desgaste físico y emocional”.

El informe también señala que Mejía presenta afectación emocional a través del llanto, enojo, frustración, inseguridad y miedo por las amenazas al referir “me preocupa en este momento mi seguridad, en cualquier momento aparezco muerta, tengo que asistir a las reuniones porque si no, me sacan del Concejo lo cual puede afectar el área laboral”.

La psicóloga recomendó que la exconcejala inicie un tratamiento psicológico para restablecer su plan de vida.En la evaluación médica efectuada en el Hospital de Joyabaj se indica que la paciente presenta una lesión leve en el rostro.

En el peritaje psicológico del INACIF se resalta que la periodista estuvo inmersa en una dinámica de trato hostil dentro del contexto laboral exponiéndola a un clima emocional tenso y negativo de parte del presunto agresor, a quien identifica como Florencio Carrascoza, que ejerció en su contra trato hostil en diferentes momentos, amenaza con arma de fuego, por lo que fue expuesta a un estrés crónico.
Se identificó en la exfuncionaria respuestas emocionales que afectan su desempeño y su vida lo cual constituyen como daño psicológico, alteración emocional que afectó su estabilidad psicológica influyendo negativamente, leyó Loarca.

También se presentaron dos cedés con grabaciones de los hechos ocurridos el 14 de marzo de 2019. La abogada señaló que hay elementos suficientes para mostrar que el alcalde Florencio Carrascoza sí ejerció violencia contra la mujer en su manifestación física y psicológica en el ámbito público en contra de Anastasia Mejía.

“En el momento de los hechos existía una relación interpersonal laboral entre el alcalde y la agraviada, ella pertenece al sexo femenino, hubo sufrimiento psicológico y agresión corporal directa al darle un puñetazo en el rostro, la intimidó con un arma con el fin de menoscabar su autoestima e integridad, tal como lo establecen los informes”, señaló Loarca.

La defensora solicitó a la jueza que se continúe con el proceso de antejuicio y que sea declarado con lugar, en el momento oportuno, por lo que deberán practicarse todas las diligencias necesarias para esclarecer el hecho y que solicite a la Dirección General de Control de Armas y Municiones (Digecam) una constancia de portación legal de arma de fuego por parte del alcalde, para poder corroborar la declaración de la agraviada y de los testigos que presenciaron el hecho.

Existe un tipo penal de violencia contra la mujer en su manifestación física y psicológica con la finalidad de ocasionar un sufrimiento físico, psicológico y emocional que limitó el pleno ejercicio de sus derechos, afectando la vida y la integridad personal, siendo el móvil del hecho las relaciones desiguales de poder basados en su género y etnia ocasionada por el alcalde, concluyó la abogada.

Según la defensora, los hechos no estuvieron motivadas por revanchas o competencias político partidistas, así como razones espurias, “se dieron bajo violencia por razón de género, es decir por el hecho de ser mujer, mujer indígena y el haberse atrevido a participar en actividades que rompen paradigmas y roles establecidos para las mujeres”.

Por ello piden que se le retire la inmunidad a Carrascoza y pueda ser juzgado como ciudadano. Además de fungir como concejal séptimo, Mejía es periodista y dirige los medios Xolabaj Radio y Xolabaj TV.

Pide suspender audiencia
Durante la audiencia, la defensa de Carrascoza solicitó que se pueda ampliar el tiempo y pidió una copia del expediente para realizar un análisis técnico para ejercer la defensa. La jueza accedió a reprogramar la audiencia para el 14 de abril.

Carrascoza lleva más de 10 años como alcalde de Joyabaj y su gestión ha estado marcada por vínculos con funcionarios investigados por corrupción, según la investigación “Criminalizar para silenciar: las investigaciones de Anastasia Mejía que exponían la corrupción en Joyabaj”, publicado por la revista Ruda.

Tras una denuncia del alcalde, Mejía fue detenida en septiembre de 2020 junto a la presidenta de la Asociación de Comerciantes de Joyabaj Petrona Siy, acusadas de sedición, incendio agravado y robo agravado. Ambas mujeres fueron señaladas por el alcalde de haber sido responsables de una manifestación que terminó en un incendio afuera de la municipalidad el 24 de agosto de 2015, evento que fue transmitido en vivo por Anastasia Mejía en su labor de informar para el canal Xolabaj TV.
La audiencia en contra del alcalde se dio dos años después de que Mejía interpusiera la denuncia en contra del jefe edil.

Un mes en la cárcel sin primera declaración, la periodista Anastasia Mejía y Petrona Siy