Por: Carlos Fernández

Twitter @carlosfercid

El caso del “Hogar Seguro” Virgen de la Asunción, por donde se vea, es un crimen de Estado. Otra masacre de inocentes, perpetrada desde el aparato de gobierno y sus funcionarios al servicio de intereses particulares. Tal como ocurrió en la Cumbre Alaska en 2012, durante el nefasto gobierno de Otto Pérez y Roxana Baldetti, cuando civiles fueron masacrados por el Ejército de Guatemala mientras manifestaban pacíficamente. El Estado guatemalteco sigue asesinando a sus ciudadanos, tal y como lo hacía en los años del apogeo de las dictaduras militares que han cogobernado con las oligarquías.

Cuando decimos que #FueElEstado, no es un capricho. Tampoco es oportunismo como el manifestado por diferentes funcionarios públicos que hicieron propicia la desgracia de 36 familias que lloran hasta el cansancio a sus hijas asesinadas. Ver a los diputados haciendo ejercicio de soberbia y oportunismo asquea tanto como la actitud del presidente Jimmy Morales, quien de manera cobarde evade la responsabilidad del Ejecutivo y sus instancias en esta masacre.

Por su parte, el Ministerio Público, la Procuraduría General de la Nación, la Procuraduría de los Derechos Humanos y hasta el Organismo de Judicial conocían desde hace meses de las denuncias de menores y sus progenitores, en relación con los vejámenes de los que eran objeto en ese lugar, y no hicieron nada. Se limitaron quizás a registrar en su extensa burocracia las denuncias y a ponerlas en una gaveta. Tanto Estado para nada. Como en la época del Conflicto Armado Interno, incumplieron con sus funciones.

Mientras tanto, la indignación empieza a convertirse en rabia. Las redes sociales se han encargado de enviar un mensaje claro a las autoridades del país que han sido en su conjunto, cómplices silentes de la barbarie. #FueElEstado en su diversidad el que falló miserablemente en lo más elemental: abrigar a la niñez que es el futuro del país.

Pero Guatemala ya no es indiferente. Por eso el pueblo de manera genuina se ha autoconvocado a las diferentes Plazas Centrales del país el sábado 11 de marzo de 2017 a las 15 horas, para manifestar de manera masiva y pacífica, para gritar hasta #QueSeVayanTodos, porque #FueElEstado quien por acción u omisión es responsable de la masacre de 36 niñas en el “Hogar Seguro” Virgen de la Asunción. Los espacios públicos serán ocupados nuevamente el tiempo y las veces que sean necesarios por la ciudadanía, porque aunque a los que hacen gobierno no les guste, Guatemala va a cambiar.